Este sabado, día 31 de octubre, comenzamos las reuniones mensuales del grupo de Dena en este curso 2009-2010. A ellas asisten cursillistas del arciprestazgo del Salnés y también otras personas que aun non han realizado su cursillo.
El tema de la reunión trató sobre qué buscamos en la vida. En los trabajos de grupo llegamos a la conclusión de que ante la respuesta de la sociedad de hoy, materialista y sin espiritualidad, sentimos la necesidad de que Alguien nos enseñe el Camino a seguir en la vida, que nos revele qué hay de verdad en nuestras ilusiones, qué hay de positivo en nuestras decepciones, qué hay de sentido en nuestros absurdos.
"Al problema del hombre, solamente Dios le da respuesta plena y totalmente cierta" (Concilio Vaticano II)
Existe una felicidad que tiene su origen en Dios y que los creyentes, de alguna forma, podemos acoger, experimentar y mismo gozar. Un Dios del que muchos dudan, al que bastantes abandonan y por Él que tantos se siguen preguntando. Un Dios al que los creyentes más auténticos también siguen invocando con confianza:
"El Señor es mi pastor, nada me falta:
en verdes praderas me hace recostar.
me conduce hacia fuentes tranquilas y repara mis fuerzas....
...habitaré en la casa del Señor por días sin término" (Salmo 22)
No basta con preguntarse si nuestra vida tiene sentido o si existe la felicidad. Hay que buscar la forma de que nuestras vidas encuentren un ideal y la felicidad no sea solo un sueño inalcanzable...
Señor, has estado grande con nosotros y estamos alegres.
¡Qué grandes son tus proyectos para nosotros!
¡Qué profundos son tus deseos para el que te busca!
Es bello, Señor, vivir siendo Tú el centro de mi vida....
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